En alguna otra ocasión os hemos hablado del efecto de las paredes de cristal en lugares como el baño de una suite principal o incluso en una piscina. No obstante, hoy queremos hablar de este tipo de material en las paredes del resto de las estancias de un hogar.
¿Habéis imaginado alguna vez paredes de cristal en una habitación principal? Lo cierto es que la privacidad se puede ver bastante reducida con este tipo de material, pero nadie negará que las vistas que obtendremos, tanto por el día como por la noche, sean de lo más espectaculares.
Gracias a estas paredes el recibo de la luz bajará considerablemente, y es que no hay ninguna otra forma mejor de aprovechar la luz natural en nuestro hogar. Además, si queremos ir un poco más allá en el ahorro podríamos combinar el uso de estas paredes de cristal con iluminación solar. Teniendo en cuenta que nuestra habitación estaría todo el día alimentada con la luz del sol, por la noche no tendríamos problema alguno en disfrutar de la energía solar recogida por el día. Existen numerosos productos de iluminación solar en la red y en las grandes superficies.
Como decíamos, quizá el único inconveniente en este tipo de paredes sea la falta de privacidad, algo que se puede suplir colocando algún tipo de cortina o paneles japoneses. No obstante, esta opción le quita un poco de gracia.
También está la posibilidad de usar materiales que por el lado de la habitación son completamente transparentes, pero que por fuera se observan totalmente opacos. Milagros de la tecnología.
Aunque una habitación iluminada puede ser el mayor de nuestros sueños, quizá evitemos ese problema de privacidad usando esas paredes de cristal en el salón. Imaginad la gran cantidad de luz que recibiríamos en esta estancia tan importante.
Evidentemente no todos vivimos en casas unifamiliares, por lo que usar esas paredes en el exterior se complica. No obstante, también podemos intentar ampliar un pasillo colocando paredes de cristal o quizá envolviendo nuestra cocina con este material para que quede a la vista de cualquiera desde nuestro comedor.
Foto vía: vintageandchicblog, cerrajeriabarcelona, casadiez